Entienda porqué el beber entre ocho a diez vasos de agua helada al día ayuda a adelgazar y conozca cuatro alimentos termogénicos que potencian la dieta. El agua helada hace aumentar el metabolismo para que la temperatura del cuerpo suba.
Un vaso de agua helada no es solo refrescante pero también ¡adelgaza! La explicación es científica: cuando bebemos entre ocho y diez vasos de la bebida bien helada, nuestro cuerpo empieza una jornada para subir su propia temperatura y mantenerla en la casa de los 37 ºC. “El esfuerzo para eso provoca un gasto de cerca de 200 calorías, lo que equivale a una carrera de 4 km”, explica la nutricionista Luana Stodutto.
Impresionante, pero esa cantidad de agua diaria, asociada a una vida saludable, con caminatas ligeras u ejercicios aerobicos, pueden hacernos perder hasta 4 kg al mes.
Sin embargo, es importante no beber el agua toda de una sola vez, y, si, dosificar la cantidad al largo del día. Y para ayudar aún más el proceso de adelgazamiento, podemos hacer uso de cuatro alimentos que, según Luana, son termogénicos, o sea, hacen el cuerpo quemar calorías.
Termogénicos: Son alimentos que elevan la temperatura del cuerpo, obligándolo a trabajar más en la digestión (el agua helada y los ejemplos abajo están en esta categoría). Este esfuerzo eleva la quema de calorías y grasas. Sin embargo, para eso, tu menú diario debe tener de 10% a 15% de alimentos termogénicos.
Los alimentos que potencian la dieta del agua helada: Ellos son sabrosos, baratos, fáciles de ser encontrados y pueden hacerte adelgazar aun más rápido. El jengibre acelera el metabolismo en un 20% y, por eso, entra en la lista de los termogénicos.
Jengibre: Acelera el metabolismo en un 20%. Puede ser consumido en crudo, en el aliño de aves y pescados, salteado, como infusión y también batido en la licuadora con frutas. Lo ideal es comerlo tres veces al día.
Guindilla y pimientos: Ambos mejoran la digestión y aumentan la temperatura corporal siendo capaces de intensificar el metabolismo hasta en 20%. Podemos consumir de tres a cuatro gramas al día, como aliño de platos calientes y también en ensaladas.
Té verde y té blanco: Los dos aceleran el metabolismo. “Y los compuestos que contienen reducen la absorción del azúcar en la sangre, lo que ayuda a disminuir la compulsión por dulces”, dice Luana. También inhiben la acción de la amilase, enzima responsable por la digestión de carbohidratos, acelerando el tránsito intestinal. Lo ideal es beber 1 taza (té) de la bebida, de cinco a diez minutos antes de las comidas principales.
Semilla de lino: Por poseer omega 3, aumenta el metabolismo y quema calorías. También elimina el exceso de líquidos del cuerpo, dándonos más energía. Mezcle dos cucharadas (sopa) en las ensaladas, batidos y ensaladas de frutas.
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